Cuando iniciamos o constituimos una empresa, todo está correcto con nuestros aliados y socios. Es conveniente, en cualquier caso, y en ese momento de inicio, firmar un pacto de socios con el objetivo de regular las relaciones internas dentro de la empresa y garantizar que, si se produce algún conflicto, éste se pueda resolver.
Aunque a priori parece algo sencillo y que incluso se puede realizar con algún modelo que consigamos, el pacto de socios puede dar muchos problemas y convertirse en una pesadilla si no se realiza correctamente. Estos son los errores más comunes que se comenten cuando se realiza el pacto de socios:
1.- Ignorar los Estatutos de la Sociedad.
Una vez que realizamos el pactos de socios, es muy importante que traslademos todas las cuestiones del pacto a los Estatutos para evitar conflictos y contradicciones en el futuro.
Uno de los problemas que se suele producir en este sentido, es que los Estatutos permiten la libre transmisión de acciones o participaciones y en el pacto de socios, sin embargo, se establece una regulación específica que no permite la transmisión libre.
2.- No regular la salida de socios.
Es imprescindible regular como va a ser la salida de los socios que quieran dejar la sociedad por los motivos que sea. Este suele ser una de las cuestiones más problemáticas dentro de las sociedades, siendo sobre todo un punto de conflicto en las start up.
3.- No elaborar las cláusulas principales
La redacción de algunas cláusulas puede resultar decisiva para los intereses de los socios. Para evitar problemas y conflictos, es importante que la redacción final recoja cuestiones tan esenciales como el período de ejercicio del derecho que se trata, el precio mínimo si lo hubiera, las cláusulas de penalización en caso de incumplimiento, etc..
4.- Esperar a la primera ronda
Muchos socios consideran que hasta que no haya inversión extranjera no es necesario firmar el pacto de socios. Pero muchas veces, la gran mayoría, el conflicto surge por discrepancias con el socio fundador o con aquel o aquellas con el que empezaste tu aventura emprendedora.
Dejar las cosas claras y por escrito desde el principio evita muchos conflictos a futuro.
5.- No ponerse en manos de profesionales
Otro error muy común es firmar un pacto de socios genérico que muchas veces incluso se descargan de internet. Se tratan de modelos muy genéricos con cláusulas aplicables o no, a algunos supuestos.
En su lugar, merece la pena pedir asesoramiento a un abogado especializado en empresas, que será el que mejor proteja los intereses del socio y le explique que está firmando y porqué
6.- Falta de claridad en el papel de los socios
Cuando todos los socios tienen la misma parte de la empresa, es muy importante desde el inicio fijar las responsabilidades de cada uno, las retribuciones si existiesen, etc.
Asimismo y unos de las cuestiones más importantes, es fijar como se va a resolver una falta de acuerdo entre los socios.
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