La respuesta que nos viene a la cabeza es que no, al tratarse de grandes empresas con grandes departamentos jurídicos y bufetes internacionales. Sin embargo, cada vez es más común ver como los Tribunales de Justicia limitan ciertos comportamientos autoritarios de estas grandes empresas, que desde su posición de fuerza exprimen y ahogan a sus colaboradores.
Amazon, PayPal y otras grandes empresas que actúan como intermediarios entre vendedores y consumidores, utilizan su posicionamiento y fuerza para llevar a cabo conductas que atentan contra los principios empresariales de buena fe llegando incluso a incumplir la Ley.
Hemos detectado que algunas de estas empresas, ante la posibilidad de recibir alguna reclamación por parte de los usuarios, llevan a cabo medidas drásticas contra los vendedores, medidas que son más graves que lo que el usuario podría reclamar. De estas medidas, la más coactiva es la retención de los saldos existentes en las cuentas de los vendedores.
Un ejemplo muy claro sería el de Amazon, ¿se imagina un día abrir su cuenta de vendedor en Amazon y comprobar que han sido retenidas todas las ventas de un producto que comercializa?
Caso Legalego
Esto fue lo que le pasó a nuestro cliente que vio con Amazon sin aviso previo, retuvo todo el importe de ventas que había obtenido por la comercialización de un producto alimenticio en varios países de la Unión Europea.
Las autoridades sanitarias de Bélgica, en este caso, consideraron que el producto alimenticio que vendía nuestro cliente debía ser retirado. En base a esta retirada de Bélgica, Amazon de forma unilateral y aviso previo a nuestro cliente, consideró retener todas las ventas que había realizado en otros países de la Unión Europea donde sí estaba permitida la venta de este producto. ¿Lo grave de esta situación? Que nuestro cliente no vendía el producto en Bélgica donde se retiró el producto, sino en otros países de la Unión Europea.
Es decir, un producto legal, comercializado solo en países que autorizan su venta y que cuenta con todos las autorizaciones administrativas, pero que es objeto de alerta en un país donde no se vende, provoca que Amazon se apropie de los fondos del vendedor de manera unilateral.
Ante este “atropello”, nuestro cliente contacta con nosotros y después de estudiar su caso a través de nuestro equipo técnico en alimentación ,enviamos una comunicación a esta gran empresa exigiendo la devolución de todos los importes retenidos, y en su caso, que se justifique documentalmente en que concepto se han apropiado de los fondos.
A las pocas semanas y tras una dura negociación donde acreditábamos el error manifiesto cometido por Amazon, nuestro cliente recibió el abono de la práctica totalidad de las ventas realizadas y que le retuvieron en su cuenta de vendedor.
Un caso parecido le sucedió a otro cliente con su cuenta de Paypal. En este supuesto, esta gran empresa de pagos consideró que nuestro cliente había recibido transacciones por la venta de un producto alimenticio cuya venta está prohibida y decidió retener 20.000 euros de las cuentas.
Tal decisión sin embargo, era errónea. Paypal se defendía en sus extensas e incomprensibles políticas. Pero tras acreditar que la comercialización del producto es legal, conseguimos que a nuestro cliente se le devolvieran todas las cantidades retenidas.
En las relaciones entre empresas el contrato (es el elemento esencial que regula esas relaciones, sin embargo, estas grandes empresas tienden a redactar documentos en los que existen cláusulas claramente abusivas y que trasladan toda la responsabilidad hacia el pequeño empresario con una gran y grave desproporción con los derechos que se asignan estas grandes empresas.
¿Que hacer?
Por ello, recomendamos a todas las empresas que hayan sufrido abusos por parte de estas grandes corporaciones, busquen asesoramiento legal y traten de luchar contra estas prácticas totalitarias que se alejan del principio de buena fe y en muchas ocasiones van incluso en contra de la ley.
No hay comentarios todavía.